Cuando tratamos de utilizar herramientas que nos permitan diseñar la estrategia de nuestra organización sanitaria, hay que comenzar por el análisis de las variables de las que se compone la organización. Es decir, debemos realizar un análisis científico de todas ellas. Así pues, debemos comenzar por aquellos aspectos que se consideran factores críticos:

El análisis comienza por el conocimiento de las condiciones actuales de la organización y la consideración futura de evolución. En ambos escenarios es preciso considerar los recursos de los que disponemos, los que necesitamos, y en la proyección futura los que vamos a necesitar.

En la actualidad, un factor de éxito para las organizaciones es el estado de la tecnología, en este aspecto debemos observar de qué tecnología disponemos, las posibilidades de inversión tanto para la compra como para los posteriores costes de reposición.

 

Al mismo nivel de la tecnología, se encuentran aspectos como son las capacidades y competencias de los miembros que componen la organización. Esto es así, porque estas competencias serán las que definan los procesos que podrá desarrollar la organización y ofrecerlos a la población de referencia.

De igual modo, hay que conocer los recursos financieros y la capacidad de inversión, esto va a determinar la posibilidad de adquisición de la tecnología sanitaria, así como la contratación y formación de los profesionales sanitarios que se encuentran en la organización.

Observación del microambiente

Este debe ser considerado como el entorno más cercano, donde se realizan los procesos sanitarios, es decir, nos estamos refiriendo a los espacios asistenciales.

Este microambiente se compone de:

Los pacientes que serán los que reciben el producto sanitario y quienes demandan las distintas necesidades de atención.

Los profesionales, de sus características, capacidades y competencias va a depender la posibilidad de cubrir las diferentes demandas de salud.

Los proveedores sanitarios. Aunque se encuentran en distintos planos de la organización, a nivel asistencial en este microentorno, la existencia y la posibilidad de asistir a las demandas de los profesionales por parte de estos proveedores, va a partir a la organización abordar las demandas de la población de referencia.

Variables internas de las organizaciones sanitarias

Los procesos sanitarios son la primera variable a considerar, ya que estos son las que determinan la oferta de servicios y todo aquello que la población podrá demandar a la organización a través de la cartera de servicios.

Las variables personales, es decir, los profesionales. De sus características, formación, competencias, capacidad de liderazgo, motivación, comunicación, etc., se condicionará en buena parte la actividad y las posibilidades una asistencia de calidad ajustada a la demanda.

La tecnología. Esta tecnología sanitaria en la actualidad ofrece el plus necesario que nos permite atender distintas demandas. El diagnóstico, tratamiento y cuidado de pacientes con patologías concretas depende de la existencia y el nivel de la tecnología.

Diseño de procesos. Son lo que capacita a la organización para entender y abordar la demanda. Facilita la organización y la coordinación de las distintas unidades y áreas.