El trabajo en grupos o en equipos como hemos venido explicando, lleva aparejado una alta dosis de conflictividad que es necesario conocer y gestionar. Ante estos procesos la gestora enfermera debe reaccionar conociendo cuales son las fuentes de conflicto, los mecanismos de producción y resolución de los mismos. Y lo que es más importante, saber cómo resolverlos, ya sea de una manera activa, reguladora o pasiva.
Es básico conocer, que no todos los conflictos deben dejarse evolucionar (algunos si) sin intervención, dado que esto puede tener altas dosis de pérdidas de eficiencia en el trabajo del grupo.