La realización de cualquier objeto sigue modelos concretos ya sean coches, maquinaria hasta procesos de trabajo y de comportamiento.
Todo consiste en utilizar los parámetros adecuados que se traduzcan el el resultado final equivalente a lo diseñado, planificado o deseado. Además debemos añadir, con la utilización más adecuada de los recursos.
Si hablamos de gestión sanitaria y gestión enfermera específicamente, debemos acudir igualmente al mundo de los modelos. Este es un mundo en el que también seguimos modelos, seguimos parámetros y procesos para conseguir el resultado final pretendido.
Y si a las personas que componen las organizaciones sanitarias, también siguen modelos, de trabajo y de comportamiento, que sumados vendrán a componer lo que denominamos cultura de la organización.
Los gestores sanitarios no viven separados de los modelos, será evidente para los que tengan cierta experiencia en gestión de negocios y empresas, que existen diversos estilos de gestores que podemos seguir, desde los Fordistas y Tailoristas, hasta los más modernos basados en la gestión de personas, el liderazgo, la tecnología, la orientación a las personas, la visión global y el enfoque al cliente, a la calidad total y la innovación.
A cada nivel gestor corresponde unos modelos determinados a seguir.
Los modelos aunque los podemos leer, buscar y adaptar a través de la bibliografía existente sobre el tema, es cierto que, frecuentemente corresponden a la imitación de comportamientos existentes y aceptados en la organización.
Este seguimiento garantiza la continuidad y la estabilidad de lo conocido y aceptado como normal en la organización de la que se trate.
Pero esto tiene un riesgo, el riesgo de la obsolescencia.
No solo el riesgo de la obsolescencia, sino también el riesgo de la ineficiencia, de la perdida de contacto con la realidad social y las necesidades de las personas.
La forma de evitar esto proviene principalmente de los estilos llevados a cabo por la alta dirección de las organizaciones sanitarias.
Modelo administrativo de gestión enfermera
Aunque hay muchos que piensan lo contrario, todas las decisiones que se toman en los despachos de los gestores acaban descendiendo aunque sea de forma imperceptible al resto de la la organización, incluido el nivel operativo, que en nuestro caso es el nivel asistencial.
En la gestión operativa, de los mandos intermedios de las organizaciones sanitarias, existe un modelo clásico de ejercer el liderazgo, de conducir las unidades de trabajo, que es el gestor administrativo.
Podemos decir que el gestor administrativo es:
[qodef_blockquote text=»El que desempeña sus funciones a través del control de las actividades administrativas de sus unidades.» title_tag=»h2″ width=»»]
La gestión administrativa de una unidad se evidencia a través de:
- Control y gestión de los turnos de personal. Elaboración de todo lo referente a las jornadas laborales que debe desarrollar el personal de enfermería a su cargo.
- Control de los recursos materiales. Realización y recepción de los recursos materiales, además de la determinación de necesidades materiales necesarias para la cumplimentación de la tarea.
- Localización del personal del servicio. Encargada de localizar a todo el personal del servicio (enfermeros y no enfermeros) y gestionar las necesidades de estos.
- Envío y recepción de documentos. Encargada del control, recepción y envío de la gestión administrativa de la unidad y por extensión de los servicios médicos.
- Gestión de las exploraciones diagnósticas de los pacientes. Orden y determinación de la circulación de exploraciones diagnósticas a las que se someten los pacientes del servicio.
- Control de las comunicaciones. Control de las llamadas telefónicas y mensajes entre personas.
- Gestión del orden administrativo. Control y orden de los documentos administrativos, historias clínicas y documentos de trabajo.
- Gestión del orden laboral. Control y determinación de las tareas a realizar por las distintos miembros del personal de enfermería.
Modelo de liderazgo en cuidados.
Frente a este modelo de gestor enfermero administrativo, existe otro modelo menos extendido, que reclamado.
Con ello nos queremos referir, a todas las voces que señalan la necesidad de gestionar de otra forma los servicios de enfermería.
Así podemos decir que, frente al modelo administrativo está el modelo de cuidados.
El gestor de cuidados podemos decir que es:
[qodef_blockquote text=»La persona encargada de gestionar toda la esfera del cuidado de las personas y el liderazgo de los procesos.» title_tag=»h2″ width=»»]
El gestor enfermero de cuidados de una unidad de enfermería se ejercerá a través de:
- Liderazgo de los cuidados. Referente y coordinador del proceso del cuidado directo al que se someten los pacientes, garante de la continuidad de cuidados. Atendiendo desde las necesidades más básicas a las más complejas, de forma que todos los miembros del equipo reconozcan este liderazgo basado en el conocimiento y no en la autoridad. Liderar en base a cuidados, significa garantizar y liderar prácticas basadas en la evidencia científica, eliminando todo lo proveniente de los usos y costumbres tradicionales, no contrastados científicamente.
- Gestión de las necesidades del paciente. Referente de las personas que permanecen en una unidad de enfermería, para la coordinación y resolución de las necesidades sentidas y percibidas.
- Gestión de personas. Liderazgo de las personas basando el liderazgo en la promoción del talento, el desarrollo de la autonomía profesional, la delegación de funciones y la creatividad de los miembros del equipo directamente a su cargo. Gestión de los recursos materiales. Referente y líder en la determinación de las necesidades materiales para la realización de unos cuidados basados en la calidad total y en el uso eficiente de los recursos.
- Gestión del conocimiento. Líder y promotor de las actividades científicas, investigadoras y formativas de los miembros del equipo enfermero.
- Gestión de la seguridad del paciente. Referente en la determinación de todo lo que garantiza practicas profesionales seguras.
- Gestión de la tecnología y comunicación. Referente en la practica de cuidados más allá de los limites de la organización, basando estas en la nuevas tecnologías de la comunicación.
Seguir la corriente es sencillo y habitualmente garantiza la supervivencia directiva. Por otra parte, es complicado la implantación individual de modelos de gestión alternativos. La falta de apoyo institucional por parte de la alta dirección y el resto del equipo de la mesogestión enfermera, puede determinar el fracaso de la implantación de estos nuevos modelos. Aquí es donde radica la verdadera importancia de establecer la adecuada visión de la organización, los objetivos, estrategias y planes. La orientación global de la organización es la que determinará el paso de modelos imposibles a modelos realizables de éxito.
Consulta los iBooks de Gestión de Enfermeria
Deja tu comentario
Debe iniciar sesión para escribir un comentario.